Para una compañía es fundamental un LOPA, debido a que a partir de este análisis, se determina la viabilidad y funcionamiento óptimo de sus instalaciones, ubicación de maquinaria, montaje de equipos de alto riesgo para el personal que allí labora, además de la formación y capacitación de los trabajadores que deben o tienen que contar con sus propias capas de protección.
Previamente, las empresas tendrían que contar con un HAZOP también conocido como AFO, es decir, un Análisis Funcional de Operatividad, el cual es un preámbulo de la identificación de riesgos de tipo inductiva y que está basada en la previsión y monitoreo de la probabilidad de accidentes a partir o en función de la variación o desviación de un proceso industrial determinado.
Así, el LOPA, funciona como una revalidación del AFO, con el objetivo de reforzar los análisis de las capas de protección para evitar peligros para las empresas, simple y sencillamente, se obtiene un panorama más amplio y preciso de los escenarios y situaciones de riesgos y un listado de las consecuencias de cada error o falla en algún proceso operativo de las compañías.
Al final, aquellos directivos y dueños de empresas que decidan apostar por un estudio LOPA, contarán con las posibles medidas de protección que se deben de tomar en determinadas áreas y que pueden ser estudiadas más a fondo: en primer lugar se define un escenario a estudiar, así como sus causas y consecuencias, además de una estimación de riesgo potencial al respecto.
Se asigna posteriormente una definición de riesgo tolerable, en dado caso de que el evento de peligro no haya sido mitigado, a partir de ello se determinan capas de protección con una reducción de riesgo asignado y la estimación de riesgo requerida, además del establecimiento de medidas de seguridad identificadas durante o previamente al LOPA.